La Comisión Asesora Presidencial de Expertos para Actualización de la Medición de la Pobreza informo un aumento del 6,5% a un 22,3% basándose en la nueva metodología. Los cambios, para comparar las cifras existentes, tienen como objetivo medir este fenómeno en base a la realidad nacional. Algunos de los parámetros que se incorporaron recientemente a este informe son: los patrones de consumo, la calidad de la alimentación, seguridad social, educación, vivienda, trabajo y acceso a internet.
Cambios en el sistema de medición
Además, se analizo la canasta básica, la que tenía como objetivo cubrir diariamente 2.000 calorías por persona. Sin embargo, La Comisión declaro “Este criterio pierde validez para medir la pobreza en países de ingresos medios altos, como el caso de Chile” explicando que el mayor problema alimenticio en Chile no son las faltas de calorías, sino el consumo excesivo de alimentos de mala calidad.
Otro punto critico es el acceso a la vivienda, especialmente en los alquileres. Dentro del costo en la línea de la pobreza, este ítem no ha tenido un reajuste que represente la pobreza actual. La Comisión recomienda “no considerar el alquiler imputado en los ingresos ni en la línea de la pobreza, y en su lugar, operar con dos líneas de pobreza, una para hogares que pagan arriendo y otra para los que no pagan”.
El aprendizaje en educación básica o media, medido mediante el Simce muestra que más del 50% de estudiantes clasifica en un nivel de aprendizaje insuficiente.
La pobreza multidimensional, en la que el individuo afectado es privado de manera simultanea en distintas áreas de su vida, no solo monetarias. El Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), publicado en 2017, era del 20,3% y del 16,9% en 2022.
Respuestas del Gobierno
La ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro, afirmó que «cuando un país progresa, también tiene que evolucionar y ser más exigente en los instrumentos de medición: cómo nos medimos, cómo medimos nuestra pobreza, nuestra desigualdad».


